Contribución a las orquídeas silvestres de la provincia de Segovia

Orchis papilionacea
Orchis papilionacea

 

 

El estudio de la flora vascular de la provincia de Segovia continúa deparando gratos descubrimientos. En el reciente artículo publicado en la revista Munibe, de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, “Novedades para la orquidoflora de la provincia de Segovia”, los autores, Teófilo Martín Gil y Jaime Gila Marazuela presentan los resultados de un trabajo de campo desarrollado durante cerca de 20 años, con la colaboración de botánicos y naturalistas. Se presentan 9 taxones (8 especies y un híbrido) de la familia de las orquídeas (familia Orchidaceae), novedades para el catálogo florístico provincial.

 

Las orquídeas son un grupo muy amplio dentro de las plantas angiospermas monocotiledóneas. Desde siempre han llamado especialmente la atención de aficionados a la naturaleza por la espectacularidad de sus flores, con vistosos colores y llamativos diseños. Consecuencia de ello, en los últimos años está aumentando notablemente el conocimiento sobre estas plantas en la Península. En el caso de la provincia de Segovia, el presente trabajo cifra la diversidad de la orquidoflora segoviana en 44 taxones pertenecientes a 15 géneros distintos, profundizando en la distribución y corología de estos nuevos descubrimientos.

 

El estudio de estas plantas encuentra su dificultad en la variabilidad en la época de floración dependiendo de las condiciones ambientales. Las orquídeas son plantas perennes que presentan órganos subterráneos, pseudotubérculos o pseudobulbos, rizoma o tubérculo situado bajo tierra, que se encarga de almacenar los nutrientes que permiten sobrevivir a la planta en las épocas más desfavorables. A partir de esas estructuras, cuando las condiciones del medio son las adecuadas, brotan las hojas, formando, en muchas especies, una característica roseta basal pegada al suelo. Según las especies, con el aporte energético que suministra la actividad fotosintética de esas hojas, se desarrolla un tallo que portará las flores, estructura denominada escapo floral. (Pulsar en cada imagen para más detalle)

Las flores de las orquídeas europeas presentan una morfología muy característica, con 3 sépalos y 3 pétalos, siendo hermafroditas (presentan órganos reproductores masculinos, estambres, y femeninos, ovario). Resulta especialmente llamativo el pétalo superior, que forma el labelo, y que en la mayoría de las orquídeas se sitúa, contrariamente a lo esperable, en posición inferior, debido a un proceso evolutivo denominado “resupinación”, por el cual la flor ha girado hasta quedar “boca abajo”. Es frecuente identificar en la parte trasera de algunas flores un espolón donde se almacena el néctar, apreciado por muchos insectos que actuarán a su vez como polinizadores. (Pulsar en cada imagen para más detalle e identificación).

La causa de lo llamativo de estas flores se encuentra precisamente en su relación e interacción con los insectos, en un proceso denominado “coevolución” en Biología que provoca una gran diversidad de formas en ambos grupos de organismos. Esas relaciones insecto-orquídea pueden ser muy diversas. Los insectos pueden acudir a las plantas actuando como polinizadores efectivos, como visitantes que aleatoria y puntualmente podrían ejercer como polinizadores o como simple visitantes de la planta sin participar en la reproducción de estas. Las orquídeas, a su vez, participan de diferentes estrategias en esta relación, ofreciendo néctar en los labelos o espolones, engañando a los insectos simulando la presencia de néctar o de polen, sin que en realidad lo haya, o simulando, con la morfología de las flores, ser la hembra e incitando a la reproducción a los machos de distintas especies de insectos. En este último caso, algunas especies de orquídeas llegan a presentar una floración simultánea en el tiempo con la aparición de los machos de una especie de insecto y antes de que aparezcan las hembras, lo que aumenta la probabilidad de encuentro entre los machos y esas falsas hembras que son las flores.

Ophrys apifera es una de las especies que presenta un diseño floral que mimetiza a la hembra de distintas especies de abeja.
Ophrys apifera es una de las especies que presenta un diseño floral que mimetiza a la hembra de distintas especies de abeja.
Díptero de la especie Scathopaga stercoraria sobre las flores de Neottia nidus-avis, cuyo néctar atrae especialmente a dípteros.
Díptero de la especie Scathopaga stercoraria sobre las flores de Neottia nidus-avis, cuyo néctar atrae especialmente a dípteros.
Díptero libando el néctar almacenado en el espolón de una flor de Orchis mascula.
Díptero libando el néctar almacenado en el espolón de una flor de Orchis mascula.
Ophrys scolopax es otra de las especies que podemos disfrutar en nuestros campos que engaña a los machos de abejas con el diseño de sus flores.
Ophrys scolopax es otra de las especies que podemos disfrutar en nuestros campos que engaña a los machos de abejas con el diseño de sus flores.
El lepidóptero Arctia festiva sobre Orchis purpurea
El lepidóptero Arctia festiva sobre Orchis purpurea
Hormigas sobre flores de Orchis mascula. En algunas especies se ha documentado la polinización realizada por hormigas, que recolectan y transportan los polinios.
Hormigas sobre flores de Orchis mascula. En algunas especies se ha documentado la polinización realizada por hormigas, que recolectan y transportan los polinios.

Flor de Epipactis tremolsii, con el característico hipoquilo acumulando néctar, atrayente de insectos, especialmente himenópteros, que actúen como polinizadores.
Flor de Epipactis tremolsii, con el característico hipoquilo acumulando néctar, atrayente de insectos, especialmente himenópteros, que actúen como polinizadores.

Aunque la mayoría de las orquídeas son autótrofas en la mayor parte de su ciclo vital, al menos en el comienzo de su desarrollo se comportan como heterótrofas, y para ello establecen una estrecha relación simbiótica con hongos, formando unas estructuras denominadas micorrizas, asociación habitual en las plantas. Esta relación dependiente de los hongos se torna imprescindible en las orquídeas por el reducido tamaño de sus semillas, ya que apenas almacenan tejido nutritivo que permita una correcta germinación. Entre las especies segovianas, tres de ellas carecen de clorofila en sus tejidos, comportándose como heterótrofas en todo su ciclo vital, por lo que llaman especialmente la atención al observador que se acerca con atención al mundo natural. Estas especies son Neottia nidus-avis, Limodorum abortivum y Limodorum trabutianum.

Neottia nidus-avis
Neottia nidus-avis
Limodorum trabutianum
Limodorum trabutianum

Limodorum abortivum
Limodorum abortivum

La juventud de esta familia, inserta en plena dinámica evolutiva, y la particular biología de las orquídeas ha favorecido la aparición de taxones híbridos entre especies, que en muchos casos presentan cierta viabilidad y estabilidad. En este trabajo se presenta la novedad para la provincia de Segovia del híbrido Orchis x gennarii, resultante del cruce entre Orchis morio y Orchis papilionacea, y que en la región se conocía únicamente en la provincia de León. La presencia conjunta de sus progenitores en otros lugares de la provincia no descarta nuevos hallazgos.

Ejemplar del híbrido Orchis x gennarii
Ejemplar del híbrido Orchis x gennarii
Detalle de la inflorescencia
Detalle de la inflorescencia
Flor del híbrido Orchis x gennarii
Flor del híbrido Orchis x gennarii

Algunos de los taxones presentados en el trabajo muestran una distribución amplia, como es el caso de Spiranthes spiralis, Orchis papilionacea (progenitor del híbidro Orchis x gennarii mencionado), Ophrys fusca, Epipactis tremolsii y Epipactis microphylla. A pesar de su distribución, la presencia de estas especies es complicada de detectar por su escasez, pues como se describe en el artículo muchos núcleos poblacionales presentan un número bajo de individuos, o por su época de floración y su pequeño porte, como es el caso de Spiranthes spiralis, que florece entre los últimos días del verano y el inicio del otoño.

Epipactis microphylla
Epipactis microphylla
Epipactis tremolsii
Epipactis tremolsii
Spiranthes spiralis
Spiranthes spiralis

Ophrys fusca
Ophrys fusca
Orchis papilionacea
Orchis papilionacea

En el caso de otras nuevas especies para la provincia, la distribución es muy reducida. En el caso de Coeloglossum viride y Ophrys insectifera se presenta una única población, con una veintena de individuos en el primer caso y menos de una decena de individuos en el segundo, distribuidos en un área reducida a unos pocos metros cuadrados en ambas especies. Epipactis helleborine se distribuye en tres poblaciones, detectándose un único ejemplar en una de ellas. Para Orchis ustulata se describen también tres poblaciones, destacando que en dos de ellas únicamente se contabilizaron 3 y 4 individuos.

Coeloglossum viride
Coeloglossum viride
Ophrys insectifera
Ophrys insectifera
Epipactis helleborine
Epipactis helleborine
Orchis ustulata
Orchis ustulata

A la singularidad, escasez y fragilidad de algunas de estas especies, como queda recogido en el artículo, hay que sumar la catalogación de cuatro de ellas, Epipactis microphylla, Epipactis tremolsii, Ophrys insectifera, Orchis papilionacea, en la categoría “De atención preferente” en Castilla y León, según se recoge en el DECRETO 63/2007, de 14 de junio, por el que se crean el Catálogo de Flora Protegida de Castilla y León y la figura de protección denominada Microrreserva de Flora. Este decreto desgraciadamente fue derogado en su práctica totalidad por la Ley 4/2015, de Patrimonio Natural de Castilla y León, salvo el “art. 4. Efectos de la catalogación” y la “Disposición Adicional Primera. Especies que se catalogan y los anexos, I de especies catalogadas «En peligro de extinción», II Especies catalogadas «vulnerables», III Especies catalogadas «De atención preferente» y IV Especies catalogadas «con aprovechamiento regulado». Por tanto, tan sólo se mantiene la catalogación de los cuatro taxones en la categoría “De atención preferente”.

 

La Ley 4/2015, de Patrimonio Natural de Castilla y León, propicia una nueva cobertura de protección de estas cuatro orquídeas, de modo que se incluyen las especies de “Atención Preferente” en el Inventario de Especies de Atención Preferente de Castilla y León, dotándolas de un régimen singular de protección. En relación con las microrreservas, se crea la Red de Zonas Naturales de Interés Especial (art. 83) en la que se incluye junto otras áreas naturales singulares las “microrreservas de flora y fauna”, las cuales vienen definidas en el art. 88, incorporando en su punto 2 un vago e indefinido régimen de protección, no desarrollado en profundidad, que contrasta con el desarrollo de la figura de microrreserva incluido en el decreto derogado.

 

La normativa supone una herramienta de gestión adecuada, pero, sin embargo, a pesar de haber sido aprobada primero en 2007, y posteriormente en 2015, hoy en día no se ha declarado en Castilla y León ningún plan de conservación o recuperación de ninguna especie, ni plan de conservación del hábitat, ni tampoco de manejo. Es decir, que en la práctica dicha normativa ha quedado como una especie de plan de buenas intenciones.

 

En otras comunidades ya se desarrollan ejemplos aplicados de normativas similares. Una recopilación puede encontrarse en la página web de la Sociedad Española de Biología de la Conservación de Plantas (SEBICOP), en su apartado de legislación: https://www.conservacionvegetal.org/legislacion/. Por coincidencia con este artículo, merece la pena destacar los planes de recuperación de Cypripedium calceolus, de Aragón y de conservación de Orchis palustris de Islas Baleares, ambos con más de 10 años de vigencia.

 

Aunque el desarrollo del marco legislativo se presenta fundamental en las estrategias de conservación, no es el único camino. Con el pretexto de la conservación de la flora, con especial énfasis en algunas especies de orquídeas, la Asociación Gallega de Custodia del Territorio ha firmado acuerdos de custodia del territorio para delimitar cuatro microrreservas de flora agrupadas dentro del proyecto Microrreservas de la sierra de Courel (https://www.custodiadoterritorio.org/microrreservas-da-serra-do-courel). También a partir de la riqueza de especies de orquídeas surgió un proyecto de conservación y divulgación en Almaraz (Extremadura), que ha culminado con la creación del Centro de Interpretación de la Orquídea de Almaraz “Orchydarium” (http://www.orchydarium.es).

 

Volviendo al enfoque provincial del artículo, resulta necesario destacar la necesidad de estudiar la implementación de planes de conservación y manejo de estas especies, siendo la figura de micorreserva de flora una herramienta adecuada. El desarrollo de esos planes no requiere de gran inversión puesto que deben asegurar la conservación del hábitat donde se desarrollan las especies sin alterar el mismo. Los factores de amenaza más importantes para las orquídeas silvestres, por sus impacto directo e implicaciones en la conservación de sus poblaciones, son los proyectos de concentración parcelaria, proyectos urbanísticos, de minería a cielo abierto y extracción de áridos, polígonos industriales, infraestructuras viarias e hidráulicas (proyectos de embalses) y proyectos de regadío, en los que los estudios de impacto ambiental, deben ser exhaustivos y detallados, analizando las afecciones a la biodiversidad vegetal, para paralizarlos si no fueran viables y plantear otras alternativas, reducir la magnitud de los citados proyectos o bien implementar medidas concretas de actuación directa de traslocación de poblaciones de orquídeas amenazadas. Otras amenazas directas cotidianas y por ello también muy significativas son el uso de fertilizantes y herbicidas, la alteración del suelo (roturos) o del régimen hidrológico local, la destrucción o recolección de plantas, y una herbivoría excesiva, las cuales podrían evitarse con una rápida identificación y actuaciones concretas, que, a buen seguro, proporcionarían una conservación adecuada de estas singulares especies de la flora segoviana y castellano leonesa. (Pulsar en cada imagen para más detalle y descripción).

Con este artículo deseamos dar a conocer algunas singularidades de la riqueza florística de la provincia de Segovia, motivar al aficionado por la naturaleza a su observación detallada y desde el respeto y reivindicar ante las Administraciones competentes el desarrollo de medidas que permitan asegurar la conservación de la flora.

 

Artículo completo: Teófilo Martín-Gil y Jaime Gila-Marazuela. 2019. Novedades para la orquidoflora de la provincia de Segovia. Munibe, Cienc. Nat. 67. (Enlace)

 

Para saber más: